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¡Cuidado! En verano también nos ponemos malos

Desde hace unos meses que finalizó el periodo de bajas temperaturas, concluyeron con él las gripes, los constipados, los resfriados o las faringitis propias de esas fechas. Sin embargo, durante el verano no debemos bajar la guardia, puesto que existen una serie de pequeñas enfermedades propias del periodo estival. Os contamos cuáles son algunas de las más comunes y qué hacer para paliarlas:

  • Hongos: al frecuentar las piscinas con mayor asiduidad, se pueden contraer infecciones en los pies causadas por los hongos. Para prevenirlos, se debe caminar con chanclas o secarse los pies después de cada baño. Pero si se contagia, debe tratarse con cremas antimicóticas o antifúngicos de venta libre para controlar la infección.
  • Otitis: se contagia en playas y piscinas a través de bacterias. Se trata de una inflamación muy molesta y dolorosa en el oído que puede prevenirse utilizando tapones o limpiándolos con mucho cuidado. Si ya se ha contraído, no se debe mojar el oído, tomar analgésicos y ponerse paños secos y calientes para mitigar el dolor.
  • Gastroenteritis: se producen por la aparición de bacterias o parásitos en los alimentos y en el agua debido a las altas temperaturas o a la falta de higiene. Puede causar diarreas, dolores estomacales, náuseas o vómitos. En caso de contraer, lo ideal es seguir una dieta astringente durante unos días y acudir al médico.
  • Cistitis: la aparición de bacterias en el sistema urinario es más común durante el verano debido a la humedad de las prendas de baño. Para prevenirla, además de beber mucho líquido, orinar a menudo y tomar alimentos con arándanos, se debe cambiar el bañador después de salir del agua.
  • Picaduras: en verano, al haber más insectos, las picaduras son más comunes y pueden causar inflamaciones. Para evitarlas, es conveniente utilizar repelentes de insectos. Pero si nos han picado y la comezón se hincha mucho, puedes tomar antihistamínico o aplicar sprays o pomada con cortisona.
  • Golpes de calor: si alguien sufre uno, debido al calor y a la exposición al sol, se le debe llevar a un lugar fresco y bajarle la temperatura del cuerpo con paños de agua fría.

Recuerde que en Farmacia Blanca Paloma abrimos todo el mes de agosto, de lunes a sábado, desde las 9 de la mañana hasta las 10 de la noche, además del domingo 21, para dispensarle los fármacos que necesite en el caso de sufrir alguna de estas afecciones típicas del verano.

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¿Qué tipo de crema elijo para protegerme del sol?

Durante la época estival pasamos más tiempo en el exterior, por lo que nuestra piel requiere una mayor atención ante una mayor exposición masiva a los rayos de sol. Para elegir la crema más adecuada a su tipo de piel, le proporcionamos una serie de consejos que le harán más sencilla la elección del producto solar.

En primer lugar, se debe tener en cuenta el fototipo cutáneo para elegir el fotoprotector más adecuado. Si tenemos una piel blanca propensa a quemaduras, se aconseja un FPS de 50 o más (durante todo el verano e incluso mantener la protección en cara y escote durante el invierno). Si por el contrario, se tiene una piel ligeramente oscura que se quema mínimamente, (empezar con un FPS de 50 y bajarlo a 30 cuando la piel este bronceada).

Existen zonas del cuerpo más sensibles al solo y, por tanto, se deben extremar las precauciones. Cara, cuello, cuero cabelludo, escote, hombros, orejas o empeines son algunas de ellas. Por ello, el uso de un fotoprotector superior sería muy recomendable. En el caso de cicatrices recientes, es aconsejable aplicar cremas con elevada protección solar para evitar que se oscurezcan e incluso ocluirlas con un apósito.

A los bebes es muy importante aplicarles un fotoprotector adecuado y nunca exponerlos al sol directamente.

También se debe considerar el tipo de actividad que se va a realizar durante la exposición al sol. Si se va a realizar ejercicio físico, bañarse en el agua, sudar, etc., recuerde que existen cremas resistentes al líquido, como las de formato spray.

Es conveniente que protejan contra los rayos UVA y UVB. Los primeros son rayos ultravioleta de largo alcance causantes del envejecimiento prematuro de la piel que atraviesan el cristal, las nubes y el agua. Por su parte, los rayos UVB, de longitud de onda menor, son los responsables de las quemaduras.

Además, si los protectores incluyen cierto nivel de antioxidantes (vitaminas E y C), podrán reducir el número de células de la epidermis.

Por último, recordar que existen diferentes formulaciones en los protectores solares: crema (más apropiada para cara y escote), leche (para uso en el cuerpo), spray (para deportistas), emulsiones sin aceite (para personas con pieles grasas), etc. La ausencia de perfumes y parabenes (conservantes) ayudará a que el protector sea apto para todo tipo de pieles.

En Farmacia Blanca Paloma disponemos de una amplia gama de protectores solares de marcas reputadas. Consúltenos y le asesoraremos cuál es la más adecuada para usted.

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Astenia primaveral: qué es y cómo combatirla

No a todo el mundo le sienta igual la primavera. La estación de las flores, del verdor y de los cambios de tiempo produce un pequeño trastorno en algunas personas ocasionándoles cansancio, desmotivación o alteraciones en el humor.

Los cambios climatológicos (otras condiciones de luz y presión atmosférica) y la adopción de otras rutinas (debido al buen tiempo y a que anochece más tarde, retrasamos la hora de cenar y de acostarse) pueden alterar el organismo, provocando una reducción en la producción de endorfinas. Además, ese aumento de horas de luz altera la segregación de melatonina, la hormona que regula el sueño.

Cansancio, falta de energía, dificultad para conciliar el sueño, somnolencia diurna, irritabilidad, disminución del apetito o problemas de concentración son algunos de los síntomas característicos de la astenia primaveral.

Estos consejos para el estilo de vida permitirán superar cuanto antes la astenia primaveral, teniendo en cuenta que se trata de un trastorno adaptativo temporal (del cuerpo a estas nuevas circunstancias ambientales) más que de una patología:

  • Horarios fijos para el descanso y la alimentación.
  • Realizar cinco comidas al día con alimentos ricos en nutrientes que aporten energía, así el cuerpo no sufrirá hipoglucemias.
  • Hidratación suficiente, bebiendo, al menos, dos litros de agua al día.
  • Practicar ejercicio físico moderado con regularidad para estimular la producción de endorfinas.
  • Tomar jalea real, ya sea en pastillas o en ampollas, ya que sus propiedades energizantes y revitalizantes estimulan a aquellas personas que padecen astenia primaveral, recuperando así la actividad general y aumentando la resistencia del organismo a la fatiga y el esfuerzo.

Recuerde que, si observa otros síntomas, puede confundirse con patologías como la anemia, por lo que debería entonces acudir a su Médico de Atención Primaria.

La astenia primaveral es uno de los temas que más consultas suscita en las farmacias. En Blanca Paloma  sabremos cómo asesorarle y qué tipo de jalea real recomendable.

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Consejos para un cuidado eficaz de tus pies

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Nuestros pies requieren de cuidados especiales ya que su importancia es fundamental por cuanto constituyen el principal soporte del cuerpo humano. En épocas como la Semana Santa, feria de abril o verano; sufren las consecuencias de las largas caminatas, horas de espera, pisotones y zapatos incómodos o poco adecuados. Y es que los pies son los grandes olvidados a los que únicamente prestamos atención cuando aparecen molestias, ampollas, durezas, hongos y otros problemas similares.

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